Extraído del VII Cuaderno Temático FECOR «ChatGPT: El #CorredorTech clarifica la charla de la Incertidumbre«.
La tecnología avanza tan rápido que en muchas ocasiones parece que la realidad supera a la ficción. Cada vez ingeniamos más sistemas que complementan a la acción humana en diferentes ámbitos de la vida, abarcando desde lo personal hasta lo laboral y en todos los sectores económicos, como lo es el sector asegurador, donde no podemos dejar de incluir al canal de mediadores.
La inteligencia artificial (IA o AI en inglés) es ese término que hace unos 20 años parecía, cómo decíamos al principio, ciencia ficción propia de películas futuristas de Hollywood dirigidas por Steven Spielberg, Ridley Scott o Stanley Kubrick, pero que hoy en día ya es una realidad. Quizá no veamos (aún) robots humanoides caminando entre nosotros, pero el uso de esta tecnología, que se ha incrementado considerablemente durante estos últimos años, ha venido para quedarse, para bien o para mal.
Hace unos días, FECOR, la Federación de Organizaciones Profesionales de Corredores y Corredurías de Seguros de España, publicó y presentó al respecto un nuevo cuaderno temático, que en esta ocasión tiene como objetivo proporcionar a los corredores de seguros una visión completa y práctica sobre el uso del ChatGPT en la industria del seguro y, más específicamente, en el canal corredores.
ChatGPT: beneficios para el negocio del corredor
Entrando en tema, herramientas como ChatGPT han dado un golpe sobre la mesa, ofreciendo conocimiento al instante de prácticamente cualquier tema que se le pregunte. Esta tecnología de procesamiento de lenguaje natural (NLP) basada en inteligencia artificial, puede ayudar a los corredores de seguros a mejorar su eficiencia y eficacia. En general, permite ahorrar tiempo y mejorar la eficiencia de los procesos internos de la empresa, así como mejorar la comunicación y relación con proveedores y clientes, pero ¿cómo?:
- Gestión interna de la empresa: Puede ayudar a procesar grandes cantidades de datos y automatizar tareas rutinarias, como la clasificación y etiquetado de documentos, la organización de agendas y la gestión de tareas pendientes, asistiendo a los corredores en la toma de decisiones al proporcionar información precisa y actualizada sobre las tendencias del mercado y la evolución de los precios.
- Gestión de proveedores: La IA puede recopilar información de diferentes proveedores y comparar las diferentes opciones disponibles. ChatGPT puede proporcionar una visión general de los precios y características de los diferentes productos, lo que ayuda a los corredores a tomar decisiones informadas.
- Gestión y comunicación con las compañías de seguros: Ayuda a los corredores en todo el proceso, desde la suscripción de pólizas hasta la tramitación de siniestros. Por ejemplo, en la suscripción de pólizas, ChatGPT puede analizar la información proporcionada por el cliente y generar una propuesta de cobertura personalizada.
- Comunicación y relación con clientes que permite automatizar las comunicaciones con clientes desde el comienzo y puede integrarse en el sistema CRM del corredor de seguros.
Protección de datos y privacidad: Necesario tomar en cuenta la regulación
El uso de tecnologías como ChatGPT en el ámbito de los seguros está sujeto a diversas normas relacionadas con la protección de datos personales y la privacidad, implicaciones que la normativa tiene para los corredores de seguros que utilizan esta tecnología. Es por ello que, estos riesgos deben ser identificados y analizados cuidadosamente:
La implementación del ChatGPT en las corredurías de seguros implica la necesidad de abordar los riesgos jurídicos asociados a la exactitud de la información proporcionada, la responsabilidad por el asesoramiento, la protección de datos personales y el cumplimiento normativo:
- Considerar la exactitud y veracidad de la información proporcionada por el ChatGPT, ya que existe el riesgo de que el sistema ofrezca datos inexactos o desactualizados, lo cual podría tener implicaciones legales si los clientes toman decisiones basadas en esa información errónea. Para mitigar este riesgo, resulta fundamental asegurar que el ChatGPT esté programado correctamente y cuente con acceso a fuentes de información confiables, como la legislación vigente en materia de seguros, las pólizas y los procedimientos de reclamación.
- Considerar la responsabilidad por el asesoramiento proporcionado por el ChatGPT, ya que si el sistema ofrece recomendaciones o consejos en relación con seguros, surge la pregunta de quién asume la responsabilidad en caso de errores o negligencia. Las corredurías deben establecer claramente las limitaciones del ChatGPT y comunicar a los clientes que el asesoramiento final siempre será responsabilidad del corredor de seguros. Además, es crucial contar con una supervisión continua del funcionamiento del sistema para detectar posibles fallos y corregirlos a tiempo.
- Considerar que el uso del ChatGPT implica el tratamiento de datos personales de los clientes, lo que conlleva el deber de cumplir con las normativas de protección de datos establecidas en España, como la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) y el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD). Las corredurías deben garantizar la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los datos implementando medidas técnicas y organizativas adecuadas. Además, es necesario obtener el consentimiento informado de los clientes para el procesamiento de sus datos personales por parte de ChatGPT.
La fórmula: Tecnología + Personas
En definitiva, el uso de ChatGPT por parte de los corredores de seguros puede ofrecer una serie de ventajas significativas en términos de reducción de costes, aumento de la eficiencia y mejoras en la experiencia del cliente y en la precisión de los datos.
No obstante, también es importante reconocer que existen ciertas limitaciones y riesgos asociados con su uso en su actividad diaria. Una de las limitaciones más importantes de ChatGPT es que, aunque es capaz de generar respuestas precisas y útiles en muchos casos, no puede reemplazar completamente a un agente humano. Aunque puede ser muy útil para resolver preguntas frecuentes y rutinarias, la IA todavía no tiene la capacidad de comprender completamente el contexto de una situación, lo que puede llevar a respuestas inexactas o malinterpretaciones de las necesidades del cliente. Por lo tanto, es importante que los corredores de seguros supervisen cuidadosamente el uso de ChatGPT y no lo consideren como una solución única para todas las situaciones.
Otra limitación importante es la necesidad de datos de alta calidad para obtener resultados precisos y útiles. Los sistemas de inteligencia artificial, incluido ChatGPT, dependen en gran medida de los datos que se les proporcionan para entrenar sus algoritmos y mejorar su precisión. Si los datos proporcionados son incompletos, sesgados o no representativos, los resultados generados por el sistema pueden ser inexactos o inútiles. Por lo tanto, es importante que los corredores de seguros se aseguren de tener acceso a una amplia gama de datos de alta calidad para alimentar el sistema y garantizar su precisión.
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